Cuando mi amigo Bértold me regaló "En busca de Klingsor" de Jorge Volpi, me auguró una lectura entretenida.
Fue más que entretenida, la trama me envolvió por completo. Luego leí "El fin de la locura" y, a pesar de que no fue la misma emoción de Klingsor, me di cuenta de que, a sus 39 años, Volpi es un narrador consumado y con mundo a cuestas.
Ahora leo "No será la tierra" y como en las otras novelas, encuentro frases y planteamientos que quizás no comparto, pero cuya sola enunciación me detiene a pensar o me genera conflicto.
Es el caso de un párrafo al inicio de la novela que he compartido con varia gente sin que les resulte indiferente o chocante.
Dice así: "Por más que hombres y mujeres finjan amarse, en su interior no hay acuerdo alguno: los genes masculinos y femeninos habrán de traicionarse hasta la muerte".
Me preguntan -al ver la frase como nick en mi msn- si creo semejante cosa. Yo les digo que es solo el pensamiento del autor, pero en el fondo pienso, ¿qué importa si uno piensa o no piensa así, cuando la sola belleza de una frase tan terrible resulta arrolladora?